

¿Cómo llegan a nuestros días las representaciones culturales y simbólicas de las culturas populares de América? Respondernos supone la necesaria aceptación de la colonización forzada de pueblos originarios y esclavos africanos más el aporte de las costumbres europeas que forman los carnavales. El artículo nos presenta antecedentes respecto de la festividad y ritualidad de los Andes centrales y de Chile en particular, destacando la proyección social y cultural del proceso de mestizaje racial en las formas actuales del carnaval en Chile y los barrios de Santiago.
“Como la cultura europea se basaba en figuras e imágenes, debieron yuxtaponer estas imágenes a las representaciones simbólicas originarias. Así explicamos que a la representación femenina y maternal de la tierra, alojada en los cerros y montañas, se le designaran diversas formas de la virgen María, pero lejos de la imagen renacentista, sino con forma de cerro”.
“De esta forma el desborde de los cuerpos en los pueblos mineros se representaron a través de la figura del diablo que se rinde ante la virgen; la danza del caporal representa a aquellos mestizos que trabajaron de capataces de las faenas obligatorias españolas, mostrando el uso del sombrero y el chicote o azote y los cascabeles representando el sonido de las cadenas, como elementos característicos; también destacamos la danza del tinku, que representa el rito del hula hula que ofrenda sangre humana a la tierra a través de la pelea directa entre hombres, mientras las mujeres se visten estilizadas como las imágenes de la virgen americana y sin embargo replican movimientos que recuerdan el trabajo agrícola y sus ritos, expresando la fuerza vital del pueblo Aymara.”
DESCARGAR AQUÍ:
5- articulo antecedentes carnaval en Chile